Sinopsis:
Rebeca, recién divorciada, está tratando de encauzar su vida cuando
conoce a Alan, un joven arquitecto. Ella nunca imaginó lo que le tenía
preparado el destino, ni que gracias a su modesto trabajo, conocería a la
persona que cambiaría radicalmente su tranquila y aburrida vida de recién
separada.
Mi
opinión:
Bueno, tras tenerlo en pendientes durante bastante tiempo, me decido a
leerlo y cuál es mi sorpresa cuando descubro que tiene segunda parte!!! Casi me
da un patatús, pero claro, ya lo había empezado y no podía parar de leer…
Voy a decir, que leyendo tanto como leo, ahora me resulta muy difícil
encontrar libros que me sorprendan, y me a la hora de escoger en los
“pendientes” cuál leer, me guio de sensaciones, de lo que me transmiten las
portadas y de hecho, empiezo a leer sin mirar las sinopsis, que ya las leí en
su día cuando los dejé en el archivo “para leer”.
Dicho esto, aquí va mi humilde opinión.
El comienzo del libro es rapidísimo, me sentía como si estuviese en
una cafetería hablando con mi mejor amiga contándonos nuestras cosas después de
estar mucho tiempo sin vernos, que no llega el tiempo a nada, que tienes tanto
que contar y tan poco rato que vas a la velocidad de la luz. Esto me ha
encantado.
Las sensaciones de que te levantas un día e intuyes que será un buen
día, que habrá circunstancias que cambiarán tu vida… ¿quién no lo ha sentido
alguna vez?
Pues así le sucede a Rebeca, que tras una temporada difícil y
complicada, se levanta un día y su vida se cruza con la de Alan… Y vaya
cruce!!! Miradas intensas, sonrisas cautivadoras, voces sensuales…
Alan siente desde el primer momento que Rebeca lo mira a él, no todo
lo que le rodea, y se vuelca en conocerla, conquistarla y quererla.
Circunstancias adversas e inesperadas se interpondrán es su
prometedora relación haciendo que estén separados por obligación, para unirse
después con más intensidad si es posible.
Más acontecimientos sorprendentes y desagradables les esperan, pero
tienen claro lo que quieren y lucharán por conseguir lo que desean, pero
¿eligen el mismo camino para llegar al objetivo?
Sin duda el desenlace me ha dejado los ojos saliéndoseme de las
órbitas, pero comprendo a Rebeca y también a Alan… así que sin otro remedio,
tendremos que esperar a “Siempre a tu lado” para conocer la continuación de sus
caminos. Porque han quedado tantas cosas en el aire…
Me ha parecido una historia original, con mucho erotismo, y que deja
con ganas de saber más. Así que por favor Mel, no nos hagas esperar mucho!!!
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