Sinopsis:
Si te llamas Martina, llevas siempre la melena recogida,
eres absolutamente cerebral…
Si te has formado para ser chef y perteneces al equipo de
El Mar...
Si has sentido un chispazo al conocer a tu jefe, Pablo
Ruiz, excéntrico cocinero con estrella...
Si no soportas su indumentaria hípster, pero te irías a
cualquier parte si él te lo pidiera...
Eres sin dudarlo la protagonista de esta historia...
Y tu vida, tan ordenada, está a punto de cambiar.
Si te llamas Martina y te has enamorado perdidamente de
Pablo Ruiz...
Si te has dejado llevar y te has soltado la melena...
Si juntos habéis hecho y dicho cosas que jamás
imaginasteis...
Eres la protagonista de esta historia y tu vida está a
punto de ser otra.
Quedarás a la deriva, perderás el norte, y poco a poco
estarás más lejos de tu hogar en tierra firme.
Mi opinión:
No voy a hacer una reseña como
siempre… no voy a explicar cómo son los personajes ni cómo se desarrolla la
historia, solo os voy a decir cómo me he sentido mientras los leía y cómo me
siento después de leerlos.
Para mi leer a Elísabet Benavent es
una garantía de que mi existencia sufrirá el paso de un tornado que cuando
termina me hará ver la vida de otra manera… y como siempre, así ha sido.
Unos libros para saborear que yo he
engullido, que he tragado casi sin paladear, una pena que tendré que rectificar
leyéndolos de nuevo…
Te recuerdan, por si lo habías
olvidado, que si no te quieres tú no podrás confiar en que el amor que te dicen
tener otras personas sea real, que si no te quieres tú no podrás amar a nadie
con la intensidad que se merecen.
Insisten en que
tenemos que ser capaces de expresar nuestros sentimientos, sean los que sean,
sin miedo a los rechazos, porque al final, el resto del mundo adivino no es, y
lo que no se saca se pudre haciendo nuestra existencia más complicada. El miedo
siempre va a estar ahí, a nuestro lado, pero tenemos que aprender a convivir
con él, porque somos fuertes para ello.
Tenemos que luchar por
lo que nos merecemos, y rodearnos de las personas que nos ayudan a avanzar y a ser esas personas
que nos merecemos ser y nunca, nunca conformarnos con lo que nos parezca más cómodo
solo porque sea lo más fácil.
Me ha fascinado poder "ver" de nuevo a Victor y Valeria... Valeria... la protagonista que le dió el nombre a mi segunda hija.
Gracias Elísabet por
tambalear mi mundo, nunca nunca dejes de escribir…
Gracias a vosotras por
leer mi humilde opinión…
